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RECORDAMOS A NUESTRAS/OS COLEGAS VÍCTIMAS DE VIOLACIÓN A LOS DERECHOS HUMANOS EN DICTADURA

RECORDAMOS A NUESTRAS/OS COLEGAS VÍCTIMAS DE VIOLACIÓN A LOS DERECHOS HUMANOS EN DICTADURA

En el marco del aniversario del Golpe Militar, el Colegio de Enfermeras de Chile A.G y su Comisión de Derechos Humanos, realizan un homenaje a enfermeras víctimas de violación a los derechos humanos en Dictadura.

Carmen Margarita Díaz Darricarrere

Tenía 24 años y era estudiante de Enfermería de la Universidad de Chile en la sede Temuco y militante del MIR, cuando fue detenida por la DINA el 13 de febrero de 1975, alrededor de las 10:30 horas, a cuadra y media de su domicilio ubicado en calle Los Illanes Nº75 de Las Condes en Santiago, junto a Eduardo Iván Montti Cordero (29 años, egresado de Ingeniería Mecánica de la Universidad Técnica del Estado) y del hijo menor de éste, de sólo 5 años de edad.

Después de ser detenida en una casa junto a otras víctimas de la dictadura todos fueron trasladados al recinto secreto de la DINA denominado Villa Grimaldi, en donde fueron interrogados, torturados y recluidos en un lugar llamado «La Torre», desde donde desaparecieron la última semana de febrero de 1975.

El niño de 5 años, quien también fuera llevado a Villa Grimaldi, fue trasladado a un Hogar de Menores, donde fue encontrado fortuitamente por quienes quedaban de su familia.

Fue hecha desaparecer junto a Jaime Vásquez Sáenz, Alan Bruce Catalá y Eugenio Iván Montti Cordero.

En diciembre de 2006 se condenó a Juan Manuel Guillermo Contreras Sepúlveda a quince años de presidio mayor en su grado medio y a las accesorias respectivas en calidad de autor de los delitos de secuestro calificado de Eugenio Iván Montti Cordero y de Carmen Margarita Díaz Darricarrere y se sancionó a Marcelo Luis Manuel Moren Brito y Rolf Gonzalo Wenderoth Pozo, a la pena de diez años y un día de presidio mayor en su grado medio y a las accesorias correspondientes, por su responsabilidad de coautores de los delitos de secuestros calificados antes mencionados.

También fueron condenados Miguel Krassnoff Martchenko y Basclay Humberto Zapata Reyes, como cómplices en los delitos de secuestro calificado de Eugenio y Carmen a cinco años y un día de presidio mayor en su grado mínimo y las accesorias que corresponden, siendo todos condenados al pago de las costas del proceso.Fueron absueltos el brigadier Fernando Lauriani y el oficial de Carabineros Gerardo Godoy, ambos retirados.

El tribunal de alzada también sobreseyó por muerte al ex agente civil Osvaldo Romo. Pese a la diligencias, averiguaciones y gestiones judiciales realizadas por su familia, aún se desconoce el destino final que corrió en manos de los agentes de la DINA. El 20 de marzo de 1981, las sedes Temuco de las Universidades “de Chile” y “Técnica del Estado” se fusionan en la Universidad de la Frontera (UFRO).

En 2011, Carmen Díaz recibió su título póstumo de Enfermera por parte de la Universidad de la Frontera. A principios de 2018 recibió su título póstumo de Enfermera por parte de la Universidad de Chile.

Hilda Isolina Velasquez Calderón

Durante la madrugada del 14 de septiembre de 1973, en su domicilio en la Población Independencia de la ciudad de Talca, fueron despertados, allanados, interrogados y ejecutados por arma de fuego tres miembros de una familia: Héctor Valenzuela Salazar (27 años, Profesor universitario de Filosofía y militante del PS), Hilda Isolina Velasquez Calderón (31 años, Enfermera Universitaria y militante comunista) y su hija mayor Claudia Andrea Valenzuela Velázquez (6 años).

Carabineros llegó hasta el domicilio de la familia en el marco de las investigaciones que realizaban a raíz del incidente de Paso Nevado, donde fueron involucrados erróneamente con el intento de escape de Germán Castro (Intendente de la Provincia de Talca de la UP, militante socialista, fusilado en el Regimiento Chorrillos el 27 de septiembre de 1973, cuyo caso nunca pasó por Consejo de Guerra como las noticias de la época daban a entender).

Luego de darles muerte, los uniformados sostuvieron que fue un enfrentamiento. Cuando llegaron los familiares del profesor, aún se encontraban los cadáveres en la casa y los Carabineros presentes explicaron que se había tratado de un suicidio.

Según señala el Informe Rettig, la Comisión de Verdad y Reconciliación declaró con convicción que Héctor, Hilda y Claudia fueron víctimas de una grave violación de sus Derechos Humanos por cuanto fueron ejecutados por los Agentes del Estado, al margen de toda justificación. Los hijos menores del matrimonio, Paula (4 años) y Gonzalo (2 años) en esa época, se escondieron y salvaron de correr la suerte de su hermana y sus padres, sin embargo de todas maneras resultaron heridos.

El 5 de diciembre del año 2003 los cuerpos de los 3 ejecutados políticos fueron exhumados desde el Cementerio Municipal de Talca.

En 2004 el Carabinero (r), Emilio Muga Galfano, confiesa ser autor de los hechos. Recién en 2009 se procesa a Muga, quien se mantuvo en libertad bajo fianza, luego de cancelar $500 mil. En 2010 la Corte de Apelaciones de Talca sentenció a Muga a cumplir la pena de 5 años y un día de presidio por ambos homicidios de Héctor e Hilda y que debía cumplir la sanción de manera efectiva atendido la cuantía de la pena y los informes desfavorables de Centro de Reinserción Social Santiago Oriente de Gendarmería.

Emilio Muga Galfano muere antes de cumplir su irrisoria pena. No hubo, ni ha habido sentencia alguna en relación a la ejecución política de la hija mayor de Hilda, Claudia, de 6 años.

Jenny del Carmen Barra Rosales

Estudiante de Enfermería de la Universidad Católica, militante del MIR, fue detenida por primera vez el 17 de enero de 1974, a los 20 años de edad, por Militares de la Escuela de Infantería de San Bernardo. En esa oportunidad permaneció por espacio aproximado de 6 meses recluida en Cerro Chena, recinto de Tejas Verdes, Casa Correccional y Campamento Tres Alamos en virtud de las normas por Estado de Sitio.

En esa oportunidad se le acusaba de repartir panfletos y pertenecer al Frente de Estudiantes Revolucionarios (FER).

Una vez recuperada su libertad, continuó con sus estudios en la carrera de Enfermería de la U. Católica de Santiago. El 17 de octubre de 1977, informó a terceras personas haber sido seguida desde Santiago, pero no le dio importancia. Se le vio en un automóvil marca Peugeot 404 color gris, patente CH-800 de Renca, solicitada a la Municipalidad por la ex-DINA (la DINA había sido disuelta en agosto de 1977 creándose como su reemplazo la Central Nacional de Informaciones o “CNI”). Dicho auto pertenecía al Ministerio de Defensa.

Posteriormente fue trasladada a un centro de tortura, según testigos junto a su amigo militante del PS y fotógrafo, Hernán Santos Pérez Álvarez, donde ambos desaparecieron. El 4 de noviembre de 1977, su madre Laurisa Rosales interpuso un Recurso de Amparo, ante lo cual se solicitan antecedentes al Ministerio del Interior e Investigaciones, quienes señalaron que solo hay antecedentes de la primera detención por lo que se rechazó este Recurso y se abrió un sumario.

Laurisa denunció secuestro y el caso se sobreseyó considerando supuesta prescripción pero como no se había hecho la investigación completa se volvió a abrir sumario, el cual se sobreseyó temporalmente en 1980. Sus restos fueron encontrados en 2001 en una mina abandonada en la Cuesta Barriga, una carretera alternativa que une Santiago y Valparaíso (120 km. al Oeste de la capital).

En la antigua mina se hallaron 200 pequeñas osamentas, rastros de los cuerpos que en 1979 los agentes de la dictadura desenterraron y nuevamente hicieron desaparecer para eliminar las huellas del paradero de los fallecidos, en una operación conocida como “Traslado de televisores”, según el comunicado del gobierno. Jenny Barra es la primera mujer desaparecida en Chile cuyos restos han sido identificados gracias al trabajo multidisciplinario del SML.

En este caso también hubo colaboración de parte de un laboratorio austriaco que contribuyó con los análisis genéticos. En la Plaza Guarello de San Bernardo hay un memorial por las víctimas de la dictadura que lleva el nombre de Jenny Barra.

En octubre de 2012 se pudo notificar a su familia de la identidad confirmada de los restos de Jenny, los cuales fueron enterrados en noviembre del mismo año. En 2013 recibió su título póstumo de Enfermera por parte de la Pontificia Universidad Católica de Chile.

A finales del 2018 se inauguró una placa conmemorativa en honor a ella y se le dió el nombre de Sala Jenny Barra a la sala del Centro de Estudiantes de Enfermería de la Universidad Católica.

José Alejandro Campos Cifuentes

Nació en Carehue, era el quinto de 12 hijos, tenía 30 años y un hijo (con su pareja de nacionalidad noruega, Gunvor Kristine Sorli) a la fecha de la detención. Militante del MIR. “Campito”, como le decían, ingresó a estudiar enfermería en la Universidad de Chile, sede Temuco en 1971 donde estuvo hasta principios de 1973, año en que fue llamado a hacer el servicio militar obligatorio, presentándose el 2 de abril, dado de baja el 31 de agosto, por orden de la IV División del Ejército de Valdivia.

Se presentó voluntariamente el 7 de octubre del mismo año al Regimiento de Temuco, al día siguiente es declarado reo, siendo llevado a Consejo de Guerra por la Fiscalía Militar de Cautín, y condenado por traición a la Patria a 15 años de prisión desde el 8 de octubre en la Penitenciaría de Temuco, pena que fue conmutada por extrañamiento y salió el 11 de febrero de 1976, rumbo a Dinamarca, con prohibición de ingresar al país. En 1981 intenta regresar clandestinamente a Chile en la “Operación Retorno” del MIR.

El 19 de febrero es detenido junto a su compañero Luis Quinchavil Suárez (conocido como “Quincha”, profesor de lengua mapuche de la U. de Heiden en Holanda y también militante del MIR exiliado) en la frontera chileno-argentina por 18 gendarmes argentinos a caballo en el paso Paimún o Hua Hum, en la X Región, frente a Junín de los Andes, siendo puestos a disposición de agentes de la CNI en Neltume, en manos de quienes ambos desaparecieron, en violación a sus derechos humanos.

Conforme a lo señalado el 7 de julio de 2004, en el Fallo del pleno de la Corte de Apelaciones que aprueba el desafuero de Augusto Pinochet por su vinculación con la denominada “Operación Cóndor”, testigos señalan que ambos habrían sido trasladados por el capitán Augusto Werner Hasse, el sargento Héctor Barra Molina y un cabo de apellido Sandoval a la Dirección de Inteligencia de Carabineros en Valdivia para luego ser llevados presuntamente por el capitán Julio Benimelli a las 2:45 de la madrugada en una camioneta marca Veranello color verde oscuro, ambos vendados, al campo de tiro de La Reina en Santiago, donde según testimonios habrían sido dinamitados.

José Campos y Luis Quinchavil se encuentran en calidad de detenidos desaparecidos hasta la actualidad, pues no se han encontrado. Un mes después de la desaparición de Campito, el 20 de marzo de 1981, las sedes Temuco de las Universidades “de Chile” y “Técnica del Estado” se fusionan en la Universidad de la Frontera (UFRO). De momento, la Universidad de Chile no le ha entregado título póstumo alguno, sin embargo, en 2011 Campito recibió su título póstumo de Enfermero por parte de la Universidad de la Frontera.

Rosa Elvira Soliz Poveda

Era la mayor de nueve hermanos, nació el 27 de julio de 1951 en Nehuentue, una pequeña caleta de pescadores en la provincia de Cautín, en el seno de una familia de trabajadores.

Su padre laboraba en la mina de carbón de Lota, por lo que ella hizo sus primeros estudios en una escuela de este centro minero. En 1963 la familia se trasladó a la Población Santa Mónica de Conchalí en Santiago y Rosa continuó sus estudios en los liceos Ramón Freire e Ignacio Carrera Pinto de donde egresó a finales de 1970.

Desde el siguiente año, cuando estaba en la Universidad de Chile estudiando enfermería, su inquietud por los problemas sociales la hizo ingresar a las filas de la Juventud Socialista y a participar activamente de la Vocalía de Acción Social de la FECH en la Facultad de Medicina, así como también en jornadas de trabajos voluntarios en las poblaciones de la zona norte de Santiago.

Tras una serie de sumarios llevados a cabo por las nuevas autoridades militares que intervinieron en la Universidad de Chile a Rosa le cancelaron su matrícula de manera antojadiza debido a sus “ideas de izquierda”. Lo anterior no la detiene y empieza a ejercer como ayudante de enfermería de manera particular.

Posteriormente junto a su compañera Sara Donoso comienza a trabajar en el Consultorio del Servicio Nacional de Salud de Avenida Independencia No 1345 (actualmente “CESFAM Dr. Agustín Cruz Melo”).

Ambas se ven en la necesidad de vivir en casas de seguridad en Santiago Centro, Independencia y posteriormente en Peñalolén, adoptando para su seguridad los nombres de “Cecilia” y “Carmen”. Alrededor del 7 de julio de 1975, Rosa fue detenida por dos agentes de la DINA desde la casa de seguridad en Peñalolén y según testigos fue llevada desde el cuartel Ogalle (José Domingo Cañas) al cuartel Terranova (Villa Grimaldi). El padre de Sara, Juan Donoso Oliva, se enteró de su captura a través de una llamada telefónica recibida el miércoles 16 de julio de 1975. Pese a la denuncias de presunta desgracia en 1990 tras el término de la Dictadura militar, no se pudo dar con su paradero final y se sobreseyó temporalmente la causa.

En 2018 los ex agentes Rolf Gonzalo Wenderoth Pozo y Manuel Andrés Carevic Cubillos fueron sancionados a 18 años de prisión, como coautores de los secuestros calificados de Rosa y de otros 10 militantes socialistas, Gerardo Ernesto Urrich González fue condenado a 16 años de prisión efectiva, como coautor de los delitos de secuestro calificado de Rosa y otros 8 militantes socialistas y se decretó la absolución del agente Jorge Madariaga Acevedo.

A principios de 2018 recibió su título póstumo de Enfermera por parte de la Universidad de Chile.

Sara de Lourdes Donoso Palacios

Nació el 11 de febrero de 1950 en Antofagasta, parte de su infancia la vivió, con su familia, en la oficina salitrera “Pedro de Valdivia”. En 1970 ingresó a la Universidad Técnica y estudió Diseño solo 1 semestre, luego trabajó en el Banco Español un tiempo y comenzó a estudiar Enfermería en la Universidad de Chile hasta 1973, año en el que fue suspendida.

Era muy solidaria y una gran lectora. Militante del Partido Socialista de Chile desde 1974, donde se relaciona, junto con su compañera, Rosa Solis, a la dirección clandestina de ese partido.

En 1974 se le había suspendido su matrícula por su afiliación política y había sido reintegrada en 1975. Junto a su compañera Rosa Solis, comienza a trabajar en el contexto de su Internado Profesional (práctica final previo a su titulación) en el Consultorio del Servicio Nacional de Salud de Avenida Independencia No 1345 (actualmente “CESFAM Dr. Agustín Cruz Melo”).

Ambas se ven en la necesidad de vivir en casas de seguridad en Santiago Centro, Independencia y posteriormente en Peñalolén, adoptando para su seguridad los nombres de “Cecilia” y “Carmen”. El día 15 de julio de 1975 a las 8:30 horas, a la entrada del Consultorio donde realizaba su Internado Profesional, fue detenida por dos agentes de la DINA. Tenía 25 años a la fecha de la detención.

Algunos funcionarios y una compañera vieron dos hombres que la detuvieron y la subieron a una camioneta, pero nadie se atrevió a declarar en ese tiempo. A la fecha y por las investigaciones realizadas, sólo se ha logrado tener certeza de su detención, la cual está relacionada con la detención de altos dirigentes del partido socialista también detenidos desaparecidos y con la de su compañera Rosa Solis.

En 2018 los exagentes Rolf Gonzalo Wenderoth Pozo y Manuel Andrés Carevic Cubillos fueron sancionados a 18 años de prisión, como coautores de los secuestros calificados de Sara y de otros 10 militantes socialistas, Gerardo Ernesto Urrich González fue condenado a 16 años de prisión efectiva, como coautor de los delitos de secuestro calificado de Sara y otros 8 militantes socialistas y se decretó la absolución del agente Jorge Madariaga Acevedo.

A principios de 2018 recibió su título póstumo de Enfermera por parte de la Universidad de Chile.

Waldo César Alfaro Retamal

Se inició como practicante y auxiliar paramédico el año 1961 en el Hospital de Linares, desde donde fue enviado a la Universidad de Chile en Santiago para titularse el año 1966 como el primer hombre en Chile en formarse profesionalmente como enfermero, una carrera que a esa fecha sólo era ejercida por mujeres.

Fue galardonado como el mejor alumno de su promoción. Trabajaba en el Hospital de Linares y militaba en el PS, estaba casado con Isolina Martínez Benavides. De acuerdo con declaraciones de testigos, fue detenido el 6 de julio del año 1974 por una patrulla militar, en su domicilio. Se le imputaba abandono de funciones y la mantención clandestina de un arsenal médico.

Fue trasladado a la Escuela de Artillería para ser interrogado. Tres días después fue dejado en libertad. El 10 de julio de 1974 fue detenido nuevamente por los militares y trasladado al regimiento.

En esta oportunidad, según testigos presenciales que escucharon sus gritos de dolor, fue fuertemente golpeado y sometido a interrogatorios bajo torturas. Murió el 11 de julio de 1974, a los 35 años de edad, en el recinto militar Escuela de Artillería, por “anemia aguda secundaria a herida cortante de muslo izquierdo complicado, suicidio”, según se consigna en el Certificado de Defunción. Fue encontrado muerto en el interior de la celda donde se encontraba incomunicado.

En su boca tenía, según se consignó en el Protocolo de Autopsia, un pañuelo que le llenaba completamente la cavidad bucal y que estaba fuertemente sujeto por los dientes; y sobre la herida, según se registró en en el acta de inspección ocular de la Fiscalía que investigó su muerte, “en su herida presentaba un trapo con el cual seguramente trató de taponársela”.

Tanto la arteria como la vena femoral del muslo izquierdo de Waldo habían sido seccionadas por completo lo que le habría provocado una hemorragia masiva, un shock hipovolémico y la muerte.

No se encontró el elemento causal de la herida y la Fiscalía sobreseyó la investigación por considerar que no se encontraba suficientemente acreditado delito alguno. Posteriormente se consideró que, independiente de si fue suicidio o no, la influencia de las torturas y tratos crueles recibidos por Agentes del Estado mientras estaba detenido, fue determinante en la muerte de Waldo, por lo que fue declarado víctima de violación a los Derechos Humanos.

Humberto Cordano López

Se desempeñó como paramédico en la localidad de Puerto Cisnes, miembro del PC, exiliado en Comodoro Rivadavia después del 11 de septiembre de 1973. Fue detenido el 23 de mayo de 1977.

Testimonios fidedignos y contestes indican que la víctima fue detenida el día ya indicado en la cercanías del Hotel Céntrico de Comodoro Rivadavia. Miembro del Comité Argentino de Solidaridad con Chile en esta provincia, Humberto Cordano había realizado gestiones en favor de detenidos chilenos a raíz de lo cual fue seguido en forma notoria por agentes de la DINA en esa ciudad argentina.

Surge de los testimonios y otros antecedentes, que Humberto Cordano fue delatado por un chileno, colaborador de la DINA, encargado de detectar a los refugiados chilenos en esta provincia fronteriza con Chile.

Según el Informe Rettig, la Comisión llegó a la convicción de que en la violación a los derechos humanos de que fue objeto la víctima, consistente en su detención y posterior desaparición, tienen responsabilidad agentes del Estado de Chile, en violación de sus derechos humanos.

En 2001 la prensa accede a la información de que el caso de Humberto se encuentra mencionado en la «prueba documental» de información del Ministerio del Interior argentino sobre la desaparición de los ciudadanos chilenos en el contexto de las investigaciones de la operación “Cóndor”.

Mario Luis Quezada Solis

Nacido el 2 de agosto de 1943, tenía 32 años al momento de su detención, soltero, auxiliar de Enfermería, militante comunista.

Mario había sido prisionero político del régimen militar en Antofagasta después del Golpe , desde donde fue puesto en libertad, mudándose a Santa Rosa No339, casa 4, Santiago.

Fue detenido por agentes de la DINA el día 12 de diciembre de 1975, después de las 15:00 horas, en el domicilio de José Luis Núñez Zamora (detenido 2 días antes por la DINA), en Elisa Reyes No554, La Granja, Santiago.

Después de almorzar junto a su familia, salió de la casa alrededor de las 15:00 horas, no regresando más a ella. Como a las 23:00 horas, se presentaron en su domicilio un par de individuos jóvenes en una camioneta marca Chevrolet de color rojo, diciendo que eran amigos de Mario. Estos portaban una nota manuscrita de la víctima en la que señalaba que se encontraba bien.

Junto con ello retiraron una máquina de escribir y unos papeles. El 22 de diciembre volvieron y solicitaron vestuario para Mario Luis. El día 24, otro grupo de civiles se hizo presente, pero esta vez allanaron minuciosamente la vivienda. Todos los participantes andaban armados y encañonaron a María Ercilia Quezada Solís (hermana de la víctima), mientras ésta lavaba ropa.

El día 28, aparecieron civiles armados, los que estuvieron varias horas en la casa en actitud de espera.

Posteriormente, en el mes de enero de 1976, uno de los individuos que habían llevado la nota «visitó» el domicilio, informando que éste se encontraba bien. Mario Luis Quezada Solís, fue trasladado por sus captores hasta un recinto desconocido, donde fue torturado y permaneció algunos días al parecer en un subterráneo.

Desde ahí fue trasladado al recinto de detención y tortura de la DINA en «Villa Grimaldi» (Lo Arrieta, No8.200). Allí fue recluido y torturado en el sector de «La Torre».

Compartió su cautiverio con Oscar Patricio Orellana Figueroa, Hugo Pinto Yáñez (sobrevivientes que atestiguaron al respecto), Alejandro Avalos Davidson, Santiago Ferruz López y Ramón Ascencio Subiabre.

Estos tres últimos, al igual que Mario Quezada, continúan desaparecidos después de su detención. Debido a lo concluyente de las pruebas de la detención de Quezada Solís por parte de agentes del Estado, el Ministerio del Interior reconoció primero a la Corte de Apelaciones de Santiago y luego al Cuarto Juzgado del Crimen de Santiago la detención.

Sin embargo, indicó como recinto de reclusión al Campamento de Detenidos de «Cuatro Alamos», en vez de «Villa Grimaldi», agregando que el detenido había sido puesto en libertad el día 30 de diciembre de 1975, en circunstancias que la última vez que se le ve con vida es a mediados de enero de 1976 en el recinto de la DINA.

Según testimonios, al mediodía del 12 de enero de 1976, Mario Quezada Solís, fue sacado del recinto con destino desconocido, junto al también detenido desaparecido Jorge Fuentes Alarcón. Hasta la fecha nada se sabe acerca del paradero o suerte de Mario.

María Noelia Salazar Quezada (no se dispone de foto)

Tenía 32 años al momento de su muerte, soltera, habría militado en el MIR, muerta el 11 de septiembre de 1973 en Santiago. María Noelia Salazar Quezada murió ese día a las 10:35 horas, en la Posta Central, por herida de bala cráneo encefálica, según consigna el Certificado Médico de Defunción del Instituto Médico Legal.

Pese a no haber podido establecer las circunstancias precisas en que ocurrió su muerte, atendidas la época de ella y su causa, María Noelia Salazar Quezada fue declarada víctima de la violencia política imperante, considerándose ejecutada política.

Autor: Comisión Derechos Humanos Colegio de Enfermeras de Chile A.G.

Editor web: NAF.

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