El 16 de octubre se conmemora el Día Mundial de la Reanimación Cardiopulmonar (RCP). Esta fecha fue creada en el 2012 gracias a una declaración del Parlamento Europeo que busca crear conciencia sobre el paro cardíaco, con el fin de difundir información sobre RCP y la utilización del desfibrilador automatizado
En este contexto, hemos querido conocer la experiencia de una destacada enfermera que ha forjado su carrera en las unidades de Urgencia de los establecimientos de salud. Se trata de Carla Márquez Garcés, quien tiene más de 10 años de servicio en la unidad de Urgencia del Hospital de Puerto Montt y actualmente se encuentra en comisión de servicios en el Centro de Simulación y Entrenamiento de Habilidades Clínicas del Servicio de Salud del Reloncaví.
Egresada de la Universidad San Sebastián, asegura que siempre fue su norte trabajar en Urgencias. “Realicé mis internados en Urgencia y posteriormente me quedé trabajando. Me apasiona el manejo de paciente crítico y en esta unidad, debemos ser capaces de entregar atención a pacientes en estado crítico a lo largo de todo el ciclo vital, lo que incluye adultos y pediátricos. La unidad de emergencias se encuentra dividida por distintos sectores, cabe destacar que durante la pandemia se instaló además una UTI médica para la contingencia de pacientes graves la que funciona hasta el día de hoy.
Para Carla Márquez, toda la población del país y no sólo el personal de salud, debería poder identificar los síntomas de un paro cardiorespiratorio y capacitarse en RCP.
“Hace tres años comencé como docente en el centro de simulación del servicio de salud, donde actualmente soy instructora para disciplinas de “AHA” y “NAEMT”. En este lugar realizamos diferentes capacitaciones incluyendo RCP básico y avanzado a toda la red del servicio de salud, lo que incluye hospitales del área y SAMU. Sin embargo, un proyecto que me gustaría mucho materializar, es crear una ciudad cardioprotegida. Para eso, es necesario capacitar en RCP a toda la comunidad como reanimadores legos y no solo para profesionales del área de salud”.
“La gran mayoría de los paros cardiorespiratorios se generan fuera de los hospitales, están sucediendo en situaciones cotidianas, por lo que es necesario que la comunidad reconozca el paro de manera precoz. Eso influye de gran manera el pronóstico a la llegada de profesionales de salud. Por ejemplo, si me encuentro en un supermercado y alguien se desploma, lo primero que hay que identificar, es si la persona no responde y no respira, activando así el sistema de respuesta a emergencia “131”, iniciando compresiones”, asegura la enfermera.
Sobre el rol de enfermeras y enfermeros en las unidades de emergencia, Carla nos cuenta: “Sin duda, somos los dueños de casa. La gestión del cuidado y la calidad en la atención siempre está a cargo de enfermería. Somos quienes acompañamos a los usuarios durante todo el turno, y los que somos capaces de detectar necesidades inclusive descompensaciones de su cuadro actual. Si bien el médico evalúa y diagnóstica, enfermería cumple un rol fundamental desde el primer subproceso que es la categorización de la gravedad del usuario en el selector de demanda, priorizando la atención de emergencia, apoyamos además la planificación en las intervenciones en salud, para lo cual se necesita un amplio conocimiento en usuario crítico, siendo uno de los puntos fundamentales dentro de esta unidad el trabajo en equipo”.
El Colegio de Enfermeras de Chile saluda y destaca el rol de enfermeras y enfermeros quienes a lo largo del país, se desempeñan en la puerta de entrada de los establecimientos, como lo son las unidades de Urgencia, liderando estas unidades y realizando la gestión del cuidado con pacientes en estado crítico.