El pasado lunes 3 de marzo, en el CESFAM El Abrazo de Maipú, el Ministerio de Salud dio inicio anticipado a la Campaña de Vacunación 2025, considerando el regreso a clases y la prevención de enfermedades respiratorias. Sin embargo, nuevamente se dejó en un segundo plano a quienes hacen posible este proceso: las enfermeras.
El Colegio de Enfermeras de Chile, a través de su presidenta, Andrea Rastello, emplazó al Minsal por la falta de reconocimiento al rol fundamental de la enfermería en la campaña, así como por la persistente precarización laboral que enfrenta el gremio.
«Tenemos un compromiso con la política pública. Estamos convencidos de que las vacunas salvan vidas», dijo la presidenta del gremio, para luego añadir: «Pero también tiene un costo. La política pública es incuestionable y nos ha llevado a grandes hitos, pero no puede ser a costa de trabajadores y trabajadoras, sino que también tiene que ser una apuesta de Estado», denunció Rastello (Ver nota en Cooperativa.cl).
A pesar de la importancia de la inmunización y la inversión estatal en vacunas, las condiciones de trabajo del personal de enfermería siguen siendo ignoradas. Durante el lanzamiento de la campaña, la ministra de Salud destacó la magnitud de la inversión: “Se le ha dado un énfasis trascendental [a la campaña de vacunación], con una inversión que supera los 100 mil millones de pesos en productos biológicos, además de 13 mil millones adicionales para la implementación de más de mil puntos de vacunación”, señaló la autoridad sanitaria.
No obstante, mientras el ministerio refuerza estrategias para la prevención de enfermedades, las demandas históricas de las enfermeras siguen sin respuesta. La falta de estabilidad laboral, la sobrecarga de trabajo y el déficit de recursos no solo afectan al personal, sino que también comprometen la calidad y seguridad del proceso de vacunación en Chile.
Desde el Colegio de Enfermeras de Chile instamos a la autoridad ministerial a reunirse de manera urgente con nuestra organización para escuchar las preocupaciones del gremio y revisar la implementación de una normativa técnica actualizada, que garantice un programa de inmunización eficiente y con un impacto real en la salud pública de todos los chilenos.